La Copa Mundial de Clubes: Más allá del espectáculo

El mito de la supremacía global de clubes

No existe tal cosa como un “Campeón Mundial de Clubes” que refleje la verdadera superioridad futbolística. El formato actual —un torneo con clasificación aleatoria— ignora 30 años de datos que muestran que los cinco grandes europeos dominan el 92% del talento elite, salarios y redes de scouting. ¿Liverpool? ¿Barcelona? No están ausentes; están excluidos sistemáticamente por diseño.

Por qué Europa aún domina el fútbol

Los clubes más fuertes no se definen por cánticos de hinchas o hype en redes sociales. Se definen por presupuestos de transferencias, canteras juveniles y el modelo de distribución de ingresos de la UEFA. ¿Un mediador brasileño gana menos que la mitad de su contraparte alemán… y aún pretendemos que son iguales en escena global? Eso no es equidad; es ficción contable.

El torneo que no es uno

Compare la Copa del Mundo (nacional), la Liga de Campeones (de clubes) y este… ¿qué es lo llamado “Copa Mundial de Clubes”? Este último carece de interés a largo plazo. Los clubes europeos lo tratan como un pretemporada cálida: half their squad se ausenta para enfocarse en la supervivencia liga doméstica. Mientras tanto, los equipos CONMEBOL invierten todo en ello —porque no tienen opción.

Datos sobre drama

No necesito drama para probarlo. Mis modelos muestran que la calidad del club ≠ visibilidad del torneo. Cuando quitas el marketing y miras xG, goles esperados por jugador por minuto entre ligas —verás la verdad: la fuerza está concentrada en Europa, no dispersa por continentes para óptica.

Esto no trata sobre pasión —trata sobre distribuciones probabilísticas.